Self Love/Amor de Uno Mismo

      The Lord's commandment to love ourselves has been said in various ways and at various times in the scriptures. It is a very important commandment because if we can't love ourselves how can we love others? But loving ourselves is a hard concept for most of us to understand. Most of us first think of how egotistical it is to love ourselves or how can we ever love such a flawed person as ourselves. Truth is, as in most all things, we have to meet ourselves somewhere in the middle. The person who only sees his strengths and struts around thinking he is better than everyone else is not really loving himself, at least not in the Lord's way, because the Lord has also commanded us to be humble, and someone like this is defintely not humble. Easier to see that the person who beats himself up constantly for all the flaws and faults he has, although he appears humble, does not love himself either, nor is he truly humble. To truly love yourself you have to see your good qualities in a grateful and positive way, but you also need to see your weaknesses and work at overcoming them in a humble consistent way. Recognizing that each of us has good and not so good in us helps us stay focused on the fact that we can learn, grow and change especially as we seek the Lord's help to become what He wants us to be. And if God loves us enough to not give up on us, then we are know we are worth loving. So let's keep that in mind as we work to love ourselves in the Lord's way so that we can love our neighbor as ourself!

     El mandamiento del Senor de amarnos a nosotros mismos se ha sido dicho de diversas maneras y en varias ocasiones  en las Escrituras. Es un mandamiento muy importante porque si no podemos amarnos a nosotros mismos, como podemos amar a los demás? Pero amarnos a nosotros mismos es un concepto difícil de entender para la mayoría de nosotros. La mayoría de nosotros primero pensamos en lo egoísta que es amarnos a nosotros mismos o como podemos amar a una persona tan imperfecta como nosotros. La verdad es, como en la mayoría de las cosas, tenemos que encontrarnos en algún lugar intermedio.  La persona que solo ve sus fortalezas y se pavonea pensando que es mejor que los demás no se ama realmente a si misma, al menos no a la manera del Senor, porque el Senor también nos ha mandado que seamos humildes, y alguien así definitivamente no es humilde. Es mas fácil ver que la persona que se castiga constantemente por todos los defectos y fallos que tiene, aunque parece humilde, tampoco se  ama a si mismo, ni es verdaderamente humilde. Para amarte de verdad tienes que ver tus buenas cualidades de una manera agradecida y positiva, pero también necesita ver tus debilidades y trabajar a superarlas de una manera consistente y humilde. Reconocer que cada uno de nosotros tiene bueno y no tan bueno en nosotros nos ayuda a concentrarnos en el hecho de que podemos aprender, crecer y cambiar especialmente cuando buscamos la ayuda del Senor para convertirnos en lo que El quiere que seamos. Y si Dios nos ama lo suficiente como para no darse por vencido con nosotros, entonces sabemos que vale la pena amarnos. Así que tengamos eso en mente mientras trabajemos para amarnos a nosotros mismos a la manera del Senor  para que podamos amar nuestro prójimo como a nosotros mismos.